Con mucha emoción les quiero contar que al fin tengo mi ansiado taller. Desde que empecé a trabajar, hace 11 años, estuve en varias cocinas, algunas arrendadas otras propias, pero hoy, después de una gran decisión a nivel familiar, tengo mi propio taller a pocos metros de mi casa y eso significa que puedo estar en contacto con mi casa en forma permanente y al mismo tiempo, trabajar con tranquilidad.
Este nuevo espacio contempla un espacio para poder hacer clases, cosa que me fascina y he hecho por muchos años, pero siempre en grupos fijos y en otras cocinas, las de mis alumnas. Hoy las puedo recibir yo en la mía y en una modalidad diferente: teniendo un calendario con fechas, horarios, temáticas, dinámicas y recetas diferentes, cada persona podrá inscribirse en la clase que más le guste y acomode según sus gustos y horarios.
Me emociona mucho esta nueva etapa porque me fascina enseñar y poder hacerlo en mi casa es increíble.
Así que los espero, por mientras terminamos los últimos detalles, estén atentos a las primeras fechas.
Saludos a todos!